[PIQUETERO N°5] ¡FUERA MILANI! ¡FUERA FRESNEDA! CRISTINA METIÓ A UN REPRESOR DE LA DICTADURA AL FRENTE DE LAS FFAA EN COMPLICIDAD CON FRESNEDA QUE OCULTÓ LAS PRUEBAS

CRISTINA METIÓ A UN REPRESOR DE LA DICTADURA AL FRENTE DE  LAS FFAA EN COMPLICIDAD CON FRESNEDA QUE OCULTÓ LAS PRUEBAS

¡FUERA MILANI! ¡FUERA FRESNEDA!

Impulsemos un lista de pronunciamientos unitarios de todas las orgs de DDHH con este planteo

Natalia Saralegui

@NatiSaralegui

Alejandro Furman

@AlejandroFurman

A partir de la designación de Milani a cargo de las Fuerzas Armadas se ha desatado una enorme crisis política que tiene como eje la impunidad de la que gozan los ex represores en la Argentina, y a su vez, la utilización que hace de los mismos el gobierno de Cristina. El día 26 de junio, día de la masacre del Puente Pueyrredón, cuando la presidenta decidió ascender a Milani al cargo de jefe del Estado Mayor Conjunto puso de relieve el carácter represor de su gobierno - no olvidemos de las nuevas pruebas del Proyecto X encontradas en Campo de Mayo a principios de año. Su política, por lo tanto, se basa en mantener lo fundamental del aparato represivo de la dictadura.

Esta vez el gobierno da un salto ya que no sólo no encarcelan a los militares del proceso sino que directamente los ascienden a la más alta jerarquía de las FFAA. Incluso, pocos días después de las PASO volvieron a mostrarlo junto al Poder Ejecutivo, en ese caso con Rossi y el gobernador de Mendoza en el aniversario de la muerte de San Martín. Desde la TPR llamamos la atención sobre las responsabilidades políticas de este ascenso y esta promoción política-militar: detrás de la designación de Cristina hay un Secretario de DDHH, Martin Fresneda, que avaló por completo el nombramiento del genocida a cargo de las Fuerzas. Fresneda desde su cargo tiene la responsabilidad de haber dejado pasar este nombramiento sin haber realizado las investigaciones para vetar y enjuiciar a este candidato de la dictadura. Frente a esta gravísima situación, en donde se ve a las claras que Martín Fresneda permitió su designación, incumpliendo sus funciones y ocultando información, desde la TPR exigimos su renuncia. La salida es por izquierda y planteamos la necesidad de que la Secretaría de DDHH esté bajo control de los organismos de derechos humanos y no de funcionarios adictos al gobierno.

MILANI ES RESPONSABLE DE DESAPARICIONES FORZADAS, SERVICIO DE INTELIGENCIA Y ACTUÓ EN EL OPERATIVO INDEPENDENCIA

Como denuncian los organismos de derechos humanos del EMVJ (Encuentro Memoria, Verdad y Justicia) desde el ‘84 el Estado tiene los documentos con las denuncias de los secuestros y torturas de Ramón Alfredo Olivera y de su padre y de la participación de César Milani en estos hechos, así como su participación y encubrimiento de la desaparición del conscripto Alberto Agapito Ledo y de “acciones antiterroristas” (o sea, participación explícita en el terrorismo de Estado) en el marco del Operativo Independencia (contra la guerrilla rural del PRT-ERP en Tucumán). A Milani lo acusan militantes populares que describen en el informe realizado por la CONADEP de La Rioja hace 29 años cómo en sus tiempos de Teniente Milani concretamente se había llevado detenido a otros compañeros y cómo les realizaban los interrogatorios en su propio cautiverio. A su vez, la participación de Milani en la Inteligencia de las Fuerzas fue constatada con la publicación y el “blanqueo” de su nombre como parte del Batallón de Inteligencia 601, aunque se desempeñaba en ese rol desde la dictadura en el Batallón de Ingenieros en Construcciones 141 de La Rioja. El hecho de que el juez que investiga la causa por la desaparición del ex conscripto Alberto Agapito Ledo no haya citado a declarar a Milani en un juicio donde su declaración indagatoria fue pedida hace 5 años, pone de relieve la complicidad de la justicia con la política del gobierno de no tocar al personal militar de la dictadura y mantener los archivos secretos del Estado bajo llave.

FRESNEDA ENCUBRE A MILANI

La responsabilidad de Fresneda frente a la designación del represor surge del incumplimiento de las funciones de la Secretaría de Derechos Humanos, dado que había informado al Senado y al Ministerio de Defensa que “no se hallan antecedentes que vinculen al oficial superior propuesto con causas por violaciones de derechos humanos y/o por acciones contra el orden constitucional”, cuando en realidad Fresneda tenía acceso a los archivos de los juzgados de San Miguel de Tucumán y de La Rioja por las causas penales donde figura el nombre del Teniente MIlani.

Esto deviene de sus competencias como Secretaria de DDHH, enumeradas en su página web, dentro de las cuales fija que deberá "entender en la observación activa, el seguimiento y la denuncia de casos y situaciones relativos a los derechos humanos (...) conjuntamente con los organismos nacionales, provinciales, municipales y organizaciones de la sociedad civil vinculados a esta temática". A su vez, más detalladamente también enumera como función "entender, a través del Archivo Nacional de La Memoria (...) en la recolección, actualización, preservación y digitalización de los archivos e informaciones vinculados a la vulneración de los derechos humanos por el terrorismo de Estado, manteniendo una relación permanente con los organismos gubernamentales y no gubernamentales, nacionales e internacionales vinculados a la temática y supervisar la aplicación efectiva del conjunto de normas reparatorias dictadas por el Estado argentino".

Que Fresneda no haya elevado y puesto en conocimiento la denuncia hecha en 1984 por Olivera frente a la CONADEP de La Rioja, deja en claro que está encubriendo a Milani deliberadamente. Con sus posteriores declaraciones, donde ya contaba con la indiscutible prueba en su contra, Fresneda aún así insistió con el encubrimiento. Así lo mostró el diario La Nación en su edición del 26 de julio en el que reproducen a Fresneda llamando a que se preserve el "principio de inocencia"... en  favor de Milani. Desde la TPR denunciamos que el principio de inocencia cabe para quienes no hayan sido encontrados culpables a la luz de la evidencia, y eso de ninguna manera se aplica al caso. Frente a estas pruebas contundentes, la inocencia de Milani es una ficción jurídica sólo reivindicable por alguien como Fresneda que cínicamente es parte necesaria en el operativo de encubrimiento e impunidad.

¿QUIEN QUIERE ECHAR A MILANI Y A FRESNEDA?

El 24/7, la UCR denunció penalmente al titular de la Secretaría de Derechos Humanos " por ocultar información sobre delitos de lesa humanidad". Ese mismo día la diputada del PRO Laura Alonso realizó el pedido formal en la Cámara Baja para que Fresneda se haga presente para dar explicaciones por no haber proveído la información necesaria. Semanas después de estas denuncias, el 22/8, el fiscal federal Carlos Stornelli “imputó al secretario de Derechos Humanos de la Nación, Martín Fresneda por no haber informado al Senado sobre los antecedentes del jefe del Ejército, César Milani cuando se discutía el pliego para su ascenso a teniente general”(Perfil, 23/8), es decir que al cierre de esta edición aún se estaba a la espera de que el juez Sergio Torres dictamine si Fresneda es culpable.

El kirchnerismo intentó desautorizar las denuncias achacándoselas a la derecha y negando el hecho de que los que plantearon en primer lugar la necesidad de echar a Milani fueron los ex detenidos desaparecidos y sus familiares, que saben que MIlani estuvo involucrado en la desaparición de compañeros. Desde la TPR queremos ser claros: ni la UCR ni el PRO han impulsado ningún tipo de lucha para echar a Milani y para enjuiciarlo, menos todavía para abrir los archivos. La UCR aportó su personal político a la dictadura y es el partido de la obediencia debida y el punto final. De hecho ni siquiera han hecho algo para echar a Fresneda de su cargo en el Estado. La impostura de la UCR y el PRO que salió a atacar a Milani radica justamente en que ellos no plantean el desmantelamiento del aparato represivo, la cárcel a Milani y la apertura de todos los archivos secretos de la dictadura y, a su vez, utilizan prácticas propias de la dictadura como la inteligencia sobre las organizaciones populares, algo que quedó demostrado con Ciro James y el "Fino" Palacios.

PARA QUE DEJE DE SER UNA MÁQUINA DE COOPTACIÓN ESTATAL, A LA SECRETARÍA DE DDHH LA TIENEN QUE CONTROLAR LAS ORGANIZACIONES DE DERECHOS HUMANOS

La Secretaría de Derechos Humanos se ha caracterizado por ser la rueda de auxilio del kirchnerismo para cooptar a los distintos movimientos de lucha contra la impunidad, e incluso, contra la propia represión estatal. Sin ir más lejos, el último gran evento público que realizaron fueron las "Jornadas sobre la violencia institucional" en mayo de este año, donde intentaron hacer pasar al Estado como un tercero imparcial frente a los casos asesinados por gatillo fácil y la policía asesina. Para acabar con la utilización de la caja de la Secretaría en moneda para engañar y cooptar a los luchadores tenemos que echar a Fresneda y exigir que la Secretaría de DDHH esté bajo control de las organizaciones de derechos humanos.

LLAMAMOS A TODAS LAS ORGANIZACIONES DE DERECHOS HUMANOS Y AL FIT A PRONUNCIARSE POR EL FUERA FRESNEDA Y A LUCHAR POR EL CONTROL POPULAR DE LA SECRETARÍA DE DDHH

Hacemos un llamado a la militancia popular a posicionarse por el “¡Fuera Fresneda!” como ya lo han hecho por el “¡Fuera Milani!”, ya que sin la lucha unificada de los organismos de derechos humanos y la izquierda, no vamos a poder tocar ni a Milani ni a Fresneda. Como vimos, la derecha no tiene la autoridad moral para llevar esta lucha hasta el final. Lejos de ser “funcional a la derecha”, la lucha por expulsar a todos los funcionarios políticos y militares de derecha o procesistas es una lucha que debería ser bandera, en primer lugar, de la proclamada “izquierda kirchnerista” y de todo militante que reivindique a este gobierno “por su política de derechos humanos”. La izquierda no es ni debe ser cómplice de los procesistas ni de quienes los encubren y, por eso, es nuestra obligación luchar por su expulsión. Que Cristina le suelte la mano a Milani y Fresneda es una medida elemental en contra de la explotación demagógica de esta situación infame por parte de la derecha. La lucha consecuente contra Milani es, sin ningún lugar a dudas, una lucha contra el propio Fresneda. Invitamos a todos las organizaciones kirchneristas a sumarse a este reclamo. Desde la TPR decimos: para terminar con Milani y Fresneda, los organismos de derechos humanos de todos los signos políticos tienen que pronunciarse y pelear para conquistar este reclamo.